Es en sí un valor intrínseco en nosotros como persona y no depende de nada externo. Sin embargo, nuestra cultura actual nos ha hecho creer que el éxito depende de nuestros logros, economía, posesiones materiales, atributos físicos, relaciones, prestigio, estatus, títulos, etc. Estas son creencias muy arraigadas y afectan profundamente los estados emocionales, principalmente de las niñas y mujeres por ser estas más vulnerables de las opiniones ajenas.
viernes, 15 de abril de 2016
