Las cuerdas vocales están cubiertas por un epitelio escamoso estratificado no ciliado, especial para soportar los microtraumas continuos que se producen durante la fonación. Cada capa posee característica especiales, variando en la cantidad de colágeno, elastina y ácido hailurónico como parte del matriz extracelular lo que le provee resistencia a la deformación, absorción del microtrauma y elasticidad vocal.