En muchas ocasiones la presentación de la enfermedad es gradual y no se presentan síntomas, aunque exista un desequilibrio en el metabolismo. Sin embargo cuando una persona se expone a un fuerte estado de estrés, como un susto o una emoción, para responder ante tal situación el cuerpo genera hormonas para contrarrestarlo, como la adrenalina, lo que ocasiona que se disparen las cifras de glucosa en la sangre.
lunes, 17 de julio de 2017
